La tecnología es una herramienta que utilizamos en la mayor parte de nuestras rutinas diarias y sobre todo en la mayoría de los trabajos que realizamos. Esta herramienta está en constante cambio y evolución y es muy habitual tener que acostumbrarnos a estos cambios que nos ayudan a mejorar los procesos de nuestra forma de llevar a cabo proyectos. Lidiar con cambios constantes puede ser un verdadero reto, pero es la única manera que tenemos de avanzar y crecer. Por ese motivo es fundamental buscar siempre las mejores opciones para cubrir las necesidades particulares de cada empresa.
El primer punto por el que una empresa debe velar en todo momento es en la rentabilidad que nos puede traer cada proceso. La mejora de la eficiencia y la productividad es otro punto muy relevante. Pero a la hora de mejorar los procesos tecnológicos de la empresa no debemos olvidar aspectos como la seguridad, la fluidez de trabajo y en el caso de las soluciones de impresión, la eficacia en la gestión documental. Hay procesos a la hora de trabajar con un dispositivo de impresión, como las acciones de imprimir y escanear, que se pueden simplificar y agilizar. Para que el rendimiento sea mucho mayor, las empresas deben implementar tres factores que debemos tener en cuenta:
Mejorar el flujo de trabajo y la simplificación de tareas
Se trata de la labor de la personalización de las pantallas para lograr una experiencia de usuario mucho más versátil, sencilla y ágil. Cuando una impresora es sencilla y las operaciones que realizamos en ella se llevan a cabo de forma fluida e intuitiva, es cuando una impresora logra mejorar el flujo de trabajo de nuestra empresa.
Una idea interesante sería personalizar la interfaz o la experiencia de usuario a cada departamento, adaptando las funciones de la impresora a las tareas que se llevan a cabo en cada puesto de trabajo. Un ejemplo de esto sería un puesto de trabajo en el que se requiere la lectura de diversos códigos, donde hay tareas en las que debemos nombrar, organizar o archivar documentos. Si tenemos una impresora que hace estos trabajos de forma específica y sin margen de errores, habremos mejorado el flujo de trabajo.
Mejora de la seguridad
Este es el punto más importante a la hora de trabajar en una empresa tecnológica, que digitaliza todos sus documentos y que basa gran parte de su trabajo en la tecnología. Actualmente, es fundamental contar con una impresora que preserva la confidencialidad de los documentos de la empresa y que además protege el flujo de información de la empresa.
La gestión más sencilla de los equipos de impresión
Si hacemos que el acceso a la impresora sea más rápido y fácil y conseguimos que cualquier problema que pueda ocurrir se pueda arreglar de forma remota, habremos ganado en rapidez y productividad a la hora de desempeñar cualquier puesto de trabajo. Un buen ejemplo de ello son los equipos que se encienden de forma remota, que están conectadas a Wifi y podemos activar con un clic en nuestro teléfono móvil, las impresoras multifunción y sobre todo, la sustitución automática de consumibles.