Aunque actualmente nos rodeamos de tecnologías cada vez más innovadoras y diversas, como es habitual en nuestra sociedad de consumo, el fax sigue utilizándose en la mayoría de las empresas y sus respectivas oficinas. Además, la sociedad de consumo ha permitido que cada vez haya más variedad de modelos y tipos de fax, cada vez más diferentes y con más prestaciones. De esto y de mucho más hablaremos en este post, para que a la hora de escoger uno de estos aparatos para mandar fax, no tengas la más mínima duda.
Tipos
El fax tradicional es el que la mayoría de las personas conocen. Este modelo, que, aunque ha evolucionado al igual que los demás dispositivos, se ha mantenido casi al cien por cien fiel a los primeros modelos y a los mecanismos de sus inicios. Cuando los faxes se inventaron, los documentos solamente se podían imprimir en blanco y negro, pero a lo largo del tiempo se crearon otros modelos que tenían un rango de grises un poco más variado. Posteriormente, llegaron los faxes que se podían escanear en color manteniendo un escaneo fiel a la realidad. Lo que sí se ha seguido utilizando a lo largo del tiempo es la impresión térmica y se ha mantenido presente hasta la actualidad.
Los faxes virtuales se crearon mucho después de los tradicionales y se diseñaron principalmente para enviar y recibir faxes mediante los diversos medios digitales que han ido apareciendo, como la web, los emails y las demás herramientas ofimáticas que a día de hoy utilizamos. A diferencia de los faxes tradicionales, los faxes virtuales no requieren la existencia de una línea telefónica para funcionar o simplemente una máquina de fax en sí. Solo se necesita un software para que funcione y en la actualidad hay una gran variedad de softwares de faxes virtuales, puesto que al ser tan cómodos y mucho menos costosos han ido creándose cada vez más. Para utilizar un fax virtual solamente necesitamos instalar un software de fax.
En correo electrónico
Otra alternativa que también ha tenido mucha popularidad son los faxes en correos electrónicos, sobre todo en aquellas empresas que necesitan enviar un volumen alto de faxes. El fax puede integrarse en los correos electrónicos gracias a un software integrado dentro del proveedor del email. Su funcionamiento es muy sencillo, solamente tenemos que enviar un correo electrónico al destino que deseemos y el mismo software lo convertirá en fax. Pero el mejor de los avances en tema de faxes es el fax en smartphones, que tan solo necesitaremos una aplicación conectada a los servicios en la nube para poder ponerlo en funcionamiento. Está claro que sin los móviles nuestra vida no sería la misma y es que estos dispositivos los hemos adaptado a nuestro estilo de vida al completo.